Un reciente estudio de Deloitte reveló que la Generación Z, nacidos entre 1997 y 2012, pese a su natalicio y crecimiento en la era digital, es más propensa a caer en estafas en internet que los 'Boomers', nacidos entre 1946 y 1964, o que los 'Millenials', nacidos entre 1981 y 1997.

Según información de Showmetech, a pesar de su familiaridad con la tecnología desde la infancia, los jóvenes de la Generación Z son los principales objetivos de delitos como robo de identidad, phishing y estafas románticas.

Es así que en Estados Unidos, los casos de suplantación de identidad y otras estafas digitales aumentaron un 36% en 2023, mientras que en Brasil, el incremento fue del 35%.

El estudio de Deloitte destacó que la Generación Z en EE. UU. tiene hasta tres veces más probabilidades de ser víctimas de estafas en internet que sus mayores, con pérdidas que en 2022 alcanzaron los 210 millones de dólares entre víctimas menores de 20 años.

Dificultades de la Generación Z para identificar estafas

A pesar de ser nativos digitales, los jóvenes de la Generación Z enfrentan mayores desafíos para identificar y manejar adecuadamente las estafas en línea. Según el estudio, el 17% de ellos ha experimentado piratería en sus cuentas digitales y un 14% ha informado uso inapropiado de su información de ubicación.

Esto resalta una brecha significativa en la educación sobre ciberseguridad y el manejo prudente de la información personal en plataformas digitales.

Comparación con otras generaciones

Los Boomers, por su parte, que crecieron en una era predigital, muestran una menor incidencia de caer en estafas en internet, con solo un 5% reportando haber sido víctimas de estafas, y un 8% de piratería.

A diferencia de la Generación Z, los Boomers y los Millennials muestran una mayor cautela en línea, aunque los Millennials también están significativamente expuestos a ataques cibernéticos.

Teorías detrás de la mayor vulnerabilidad de la Generación Z

Según el estudio de Delloite, la comodidad con la tecnología y una falta de miedo inicial hacia las estafas en línea podrían estar contribuyendo a la vulnerabilidad de la Generación Z.

Los tipos de estafas que los afectan suelen explotar su dependencia tecnológica y su interacción frecuente con extraños en línea, haciéndolos blancos ideales para fraudes, especialmente románticos.

Estrategias de protección

Para combatir esta tendencia, es crucial que los individuos adopten medidas robustas de ciberseguridad, como mantener actualizado el software de sus dispositivos, utilizar contraseñas seguras, activar la verificación en dos pasos, y ser cautelosos con los enlaces y archivos adjuntos en comunicaciones de origen dudoso.

Además, es fundamental educar a la Generación Z sobre las prácticas seguras en línea y los peligros potenciales de las estafas digitales.

(Artículo de Javier Álvarez con el apoyo de la Inteligencia Artificial).