Cinco miembros de la Dirección Policial Anti Maras y Pandillas Contra el Crimen Organizado (Dipampco), acusados por secuestro agravado y otros delitos conexos fueron capturados este miércoles en un operativo de la Fiscalía Especial Contra el Crimen Organizado (Fescco), en coordinación con la Sección Antisecuestros y Operaciones Especiales.
La Dipampco es una dependencia de la Policía Nacional encargada de combatir la extorsión, sin embargo, los agentes detenidos cometían actividades contrarias a lo asignado, según la acusación.
Los individuos identificados como Osmín Orellana Paz, Lester Nahún Uclés Andino, Andy José Pérez Zelaya, Dilmer Stiven Fúnez Espinoza y Enrry Michael Cárcamo Molina, todos ellos asignados al departamento de Seguridad y Transporte Urbano.
Según el Ministerio Púbico (MP), los miembros de la Dipampco fueron aprehendidos como resultado de una investigación llevada a cabo por la Unidad Nacional Antisecuestro de la Dirección Policial de Investigaciones (DPI).
#MP y @PoliciaHonduras coordinan captura de cinco miembros de la DIPAMPCO, acusados de secuestro por los que exigían de 100 a 300 mil lempiras pic.twitter.com/UrGT39TdEy
— Ministerio Público (@MP_Honduras) April 17, 2024
Las investigaciones revelaron que el modus operandi de esta red policial corrupta consistía en contactar a sus víctimas, haciéndose pasar por conocidos, para luego subirlas a vehículos pertenecientes a la institución policial.
Posteriormente, las víctimas eran trasladadas a distintas ubicaciones en la ciudad de San Pedro Sula, donde eran retenidas hasta que se realizaba el pago del rescate exigido, que oscilaba entre 100,000 y 300,000 lempiras.
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Otros ilícitos
Las investigaciones han revelado que, en algunos casos, si las víctimas eran mujeres, eran amenazadas con abuso sexual, mientras que en otros casos se les advertía sobre la posibilidad de ser implicadas en actividades delictivas mediante la siembra de drogas, en caso de no efectuar el pago exigido.
Uno de los casos documentados tuvo lugar el miércoles 21 de febrero de 2024, cuando se recibió una denuncia de un posible secuestro en la residencial Santa Mónica de San Pedro Sula, Cortés.
(Artículo de Javier Álvarez con el apoyo de la Inteligencia Artificial).
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