Estas mujeres se preparan diariamente con bolsitas que contienen arroz, frijoles, bolillos o tortillas para distribuir entre los migrantes.
La estrategia consiste en proporcionar alimentos a aquellos que viajan en la parte inferior del tren, conocido como 'La Bestia', ya que confían en que estos compartirán con los que van en la parte superior para evitar posibles caídas al tratar de alcanzar la comida arrojada desde abajo.
La líder de este grupo de mujeres explicó que han dialogado con algunos motoristas católicos de los trenes, solicitándoles que, aunque no detengan el tren, reduzcan la velocidad.
“Ustedes son los que conducen, pero saben que llevan vidas en esos trenes, échenos las manos, no lo paren, pero bajen la velocidad. En sus manos está que la gente pueda comer un taquito”, dijo.
La comida no se termina
“Nosotros nos organizamos para poderles dales la lonchera. Nunca nos hemos quedado sin comida, gracias a Dios, cuando no hay, me quejó con l el de arriba y allí está la comida”, resaltó la Patrona.
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Crisis migratoria
La situación del flujo migratorio irregular desde Centroamérica, especialmente de Guatemala y Honduras, hacia Estados Unidos, ha experimentado un aumento en los últimos meses, según el Departamento de Seguridad de EE. UU.
En el caso de Honduras, aproximadamente un millón de compatriotas residen en EE. UU., de los cuales 70 mil están amparados por el Estatus de Protección Temporal (TPS).
Cabe destacar que, en octubre de 2023, el gobierno del presidente Biden anunció la ampliación del muro fronterizo como medida para controlar el masivo flujo de personas.
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