En abril de 2024, el Índice de Precios al Consumidor (IPC), reflejó una variación mensual de 0.28 por ciento, inferior en 0.21 puntos porcentuales a la del mes previo, cuando se reportó 0.49 por ciento.

Esta desaceleración se ve influenciada principalmente por menores precios en los alimentos, disminución en los pasajes del transporte, y el subsidio al consumo de energía eléctrica, según el informe del Banco Central.

Este mismo balance de la institución que rige la política monetaria y cambiaria detalla que la inflación interanual fue 4.84 por ciento, un índice que se ubica por cuarto mes consecutivo dentro del rango establecido entre el tres y el cinco por ciento.

La inflación acumulada hasta abril de 2024 fue de 1.69 por ciento. Las medidas de política económica que han sido aplicadas por el Gobierno han aminorado en aproximadamente 1.64 por ciento el costo de vida hasta una tasa interanual de 4.84 que hubiese llegado a 6.48 si dichas disposiciones no hubiesen sido adoptadas, explica el boletín del Banco Central.

Sin embargo, los mismos datos oficiales indican que la inflación interanual se ha incrementado. Para el caso, entre febrero de 2023 y febrero de 2024, la inflación fue de 4.50 por ciento; entre marzo de 2023 y marzo de 2024, subió a 4.76; y entre abril de 2023 y abril de 2024, ha llegado a 4.84 por ciento.

Agrega el reporte oficial que, en abril de 2024, las regiones presentaron comportamientos diversos en sus tasas de inflación. La región central presentó una reducción de su índice de precios en 0.19 por ciento, determinada por la disminución de precios de algunos alimentos.

En la región oriental, la inflación fue de 0.53 por ciento. El mayor incremento se produjo en el rubro de alimentos y bebidas no alcohólicas, en tanto la zona occidental reflejó un aumento de 0.48 por ciento en el costo de vida.

En los departamentos del norte, la variación fue de 0.35 por ciento y en la parte central, los alimentos y servicios mostraron un encarecimiento de 0.30 por ciento.

En la parte norte, la inflación fue de 0.23 por ciento y en la zona sur llegó a 0.16 por ciento.

Hay un abismo entre lo que plasman los informes oficiales y los reportes sobre vida diaria en los mercados y cómo los consumidores deben sortear los precios que cada semana suben sin control.

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