Según Aguilar, del total de 625 millones, la mayor proporción se destinó a los diputados del Congreso Nacional. Además, advirtió que la tendencia de viajes costosos persistirá en 2024, con un presupuesto estimado entre 160 y 170 millones de lempiras en concepto de viáticos.
"La tendencia de 2022 se ha mantenido en 2023 y continuará en 2024, con la gran diferencia de que en 2022 los diputados sesionaban y tenían un Congreso Nacional (CN) operativo", manifestó Aguilar.
A raíz de estas cifras, la ASJ, en colaboración con el Consejo Nacional Anticorrupción (CNA), ha constatado que solo en viajes a nivel nacional, el gasto asciende a más de 10 millones de lempiras.
Juan Carlos Aguilar también cuestionó el exceso de dinero desembolsado durante los viajes, especialmente los internacionales, utilizados con fines turísticos y que no han generado acuerdos o inversiones en beneficio de la calidad de vida de los hondureños.
La ASJ también señaló las numerosas delegaciones que acompañan a los funcionarios públicos en los viajes, como el caso reciente de Dubái, Emiratos Árabes Unidos, donde más de 50 personas participaron en la Cumbre Climática COP28.
Economistas han expresado su preocupación por el hecho de que los dólares del país se estén utilizando para viajes internacionales, contribuyendo al difícil acceso de los hondureños a la moneda estadounidense.
Parálisis legislativa
En cuanto a la parálisis legislativa, entre el 31 de octubre y el 14 de diciembre, durante más de 100 días, el Congreso Nacional estuvo ausente de sus curules debido a conflictos internos por la falta de consenso para elegir a las autoridades del Ministerio Público. Sin embargo, a lo largo del año, algunos diputados realizaron viajes a China, Rusia, Dubái, Estados Unidos y otros países.
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