El delantero italiano, Mario Balotelli, ha sufrido una vez más un lamentable hecho tras ser víctima de gritos racistas en el duelo Hellas Verona - Brescia, mientras el partido estaba en juego el atacante dejó de jugar y mandó el balón a las gradas.
Balotelli, se mostró muy molesto y amenazó con abandonar el juego. Cuando sucedió el hecho el árbitro le mostró tarjeta amarilla por lanzar el balón a las gradas, aunque posteriormente la retiró al enterarse de lo que estaba pasando.
El juego se detuvo por varios minutos. Finalmente, el italiano continuó jugando el partido y al minuto 85 marcó un gol que no pudo evitar la derrota de su equipo por 2-1.
Anteriormente, Mario Balotelli había recibido insultos cuando jugaba en el Niza de Francia, también cuando jugó en el Milan. TVC
