En Inglaterra, la Liga, la Federación y la Asociación de Futbolistas Profesionales, han mantenido una serie de reuniones en las que han planteado el peor escenario posible: que las competiciones profesionales no puedan reanudarse hasta después de junio.

El fútbol inglés está suspendido hasta el 30 de abril, fecha que podría ser prorrogada a tenor de la evolución que la crisis por el COVID-19 está teniendo en Reino Unido

Si la demora fuera mayor, la liga espera que todos los jugadores de la Premier League acepten renunciar a un 20% de su sueldo, lo que representaría un ahorro de 117 millones de euros, que serían destinados al resto de divisiones del fútbol profesional inglés.