En casi 40 por ciento se incrementó la incidencia de la criminalidad en el país.

Los mismos reportes de la Secretaría de Seguridad apuntan que la ejecución de hechos sangrientos cada 24 horas pasó de nueve en septiembre a 12 en octubre.

Los meses más violentos han sido abril, mayo, junio, agosto y octubre. El Sistema Policial de Estadísticas en Línea registra 380 homicidios en abril; 365 eventos en mayo; 352 sucesos en junio; 381 en agosto y 357 en octubre.

En este período, el índice diario de muertes tuvo una variación entre 11 y 12, según se hace constar en los informes divulgados por las entidades gubernamentales.

Enero, febrero, marzo, julio y septiembre figuran entre los meses cuando se reportó una menor actividad de los grupos delictivos, aunque en un grado relativo.

En este período fueron reportados entre 265 y 305 homicidios mensuales y un promedio entre ocho y nueve hechos criminales cada 24 horas.

Hasta finales de la semana anterior, se contabilizaban 3,234 homicidios y para la misma fecha del año pasado sumaban 3,070 eventos violentos, un incremento de 164 casos.

La violencia criminal se ha salido de control. Las mismas autoridades de las agencias de seguridad y de investigación han reconocido que hay un repunte en el número de asesinatos y homicidios en el país.

De acuerdo con lo señalado por los estudios del Observatorio de la Violencia, la ejecución de muertes múltiples se ha incrementado en un 60 por ciento respecto al año pasado.

En 2018 se contabilizaron 43 masacres con un saldo de 145 muertos. En lo que va de 2019, se cuentan 56 homicidios múltiples con un balance de 194 víctimas.

Las bandas especializadas en narcotráfico, igual como las maras y pandillas siguen desencadenando mayor inseguridad, de conformidad con los análisis de organismos especializados.

Estos mismos reportes subrayan que posible que se avance en las tareas de investigación para esclarecer los crímenes, pero de nada servirá si no se cortan de raíz las causas del entorno violento que estos días se ha acentuado.