Las cifras reflejan que la captación de divisas por la exportación de productos agrícolas se situará por debajo de los recursos obtenidos el año pasado.

Esta previsión poco halagüeña se enmarca en la desaceleración que presenta la economía hondureña, entre otros factores que afectan la comercialización de bienes agrícolas como es la caída en los precios internacionales.

De acuerdo con las proyecciones, se producirá un descenso de alrededor de siete por ciento en las toneladas de mercancías que son enviadas por Honduras.

Se recuerda que en el lapso 2016-2017, no hubo crecimiento en el volumen de mercancías llevadas a mercados externos y la consecuente baja en el número de divisas.

Entre 2017 y 2018, la captación de divisas disminuyó en 10 por ciento y se estima que al final del año en curso el comportamiento sea muy similar.

La depresión en el nivel de exportaciones se ha acentuado en los últimos dos años, según lo ratificado por representantes de los diferentes rubros que dan sustento a las actividades del agro hondureño.

Es posible que, al término de este año, el sector agrícola contribuya con 2,300 millones de lempiras en divisas, menor a la cifra esperada. Esto se debe a una caída de cerca del cuatro por ciento en el valor de todos los artículos exportados.

El desafío es buscar mayor eficiencia y atención de parte de los órganos gubernamentales que, de alguna manera, están vinculados con las labores del campo y la industria agrícola.

A estos elementos negativos se agrega otro hecho. Y es que a consecuencia de la sequía, se considera que la producción agrícola reportará un descenso de 40 por ciento.

Los reportes del Banco Central subrayan que, hasta agosto de 2019, las ventas de la actividad agrícola había totalizado 570 millones de dólares; esto es, 70 millones de dólares mensuales.

Las exportaciones de mercancías generales alcanzaron un valor de tres mil millones de dólares entre enero y agosto de 2019, lo que se traduce en un promedio de 375 millones de dólares mensuales.

Esto quiere decir que el 20 por ciento del total de productos que Honduras exporta a los principales mercados consumidores, corresponde a los bienes de origen agrícola.