Por Karen Reyes
Luego de la no aprobación para la renovación del convenio de la Misión de Apoyo contra la Corrupción e Impunidad en Honduras (Maccih), existen posiciones encontradas en el tema.
Pedro Barquero, director ejecutivo de la Cámara de Comercio e Industrias de Cortés (CCIC), es del criterio que no hay compromiso por parte de los entes del Estado para eliminar la corrupción.
Destacó que en Honduras se pierden 50 mil millones de lempiras producto de ese flagelo, sustentado por estudios internacionales, lo que genera que el 75 por ciento de los hondureños estén de acuerdo con que la Maccih continúe en el país.
Delmy Ordoñez, miembro de la Coalición de Apoyo a la Maccih, indicó que el órgano internacional se va, porque las secretarías de Estado y el Congreso Nacional, se ha visto salpicados por las investigaciones que ha realizado.
Mientras que Fátima Mena, ex diputada del Congreso Nacional, opinó que la Maccih, dio resultados concretos, y su retiro es un claro ejemplo que el Gobierno es cómplice de la corrupción, y que además, se blinda con las facultades que tiene.
De su lado el abogado penalista, Julio Ramírez, sostiene que la Maccih únicamente era un órgano que acompañaba en la lucha de la corrupción, sin embargo no es el Gobierno el culpable de su retiro, sino el Ministerio Público (MP).
El letrado fue enfático al decir que los responsables de eliminar la corrupción en el país son el pueblo hondureño, y no órganos internacionales.
Es de mencionar que el convenio con la Maccih tuvo lugar el 19 de enero del 2016 entre el Gobierno de la República y la Organización de Estados Americanos, (OEA).
